Aves de invierno
Ajalvir ofrece un hogar de invierno ideal para muchas aves europeas que migran hacia el sur durante esa época. Algunas son aves migratorias de corta distancia que se reproducen en las montañas o en las partes septentrionales de España. Otras proceden de Europa Central.
Una de las primeras en llegar es el petirrojo europeo, que suele quedarse unos seis meses. Rápidamente marca su territorio invernal y persigue a cualquier intruso. Los zorzales comunes llegan en octubre, cuando las bayas están maduras, y pronto los acompañan un gran número de estorninos negros. Como los estorninos son particularmente aficionados a las aceitunas, las bandadas descienden en grupo a los olivares. Algunos estorninos hambrientos son capaces de tragar una aceituna de una sentada, como se puede ver en la imagen.
Petirrojo europeo
Zorzal común
Estornino negro
La cantidad de mosquiteros comunes y currucas capirotadas aumenta considerablemente en octubre, a los que se les unen los colirrojos tizones y los pinzones vulgares, que no se pueden avistar frecuentemente durante los meses de verano, pero son residentes habituales en la temporada invernal.
Mosquitero común
Macho de curruca capirotada
Colirrojo tizón
Pinzón vulgar
A medida que el clima se enfría, bandadas de gaviotas patiamarillas sobrevuelan mañana y tarde con el objetivo de alimentarse en los grandes vertederos de basura de la región. Las avefrías, como su propio nombre indica, suelen aparecer cuando el clima es muy frío, y se alimentan en campos abiertos.
Gaviota patiamarilla
Las aves de jardín o de bosque, como los páridos, también se vuelven mucho más numerosas durante el invierno. Pequeñas bandadas de mitos, pinzones reales u ocasionalmente de reyezuelos listados, son algunos de los errantes invernales más atractivos.
Reyezuelo listado